SOTERRAR LAS LÍNEAS DE ALTA TENSIÓN SIN APANTALLARLAS Y SIN TOMAR LAS MEDIDAS OPORTUNAS NO EVITA SUS CAMPOS ELECTROMAGNÉTICOS
Las autoridades españolas y Red Eléctrica Española han decidido soterrar las líneas de alta tensión para evitar que los campos electromagnéticos afecten a la población. El hecho de que este cableado no sea visible no quiere decir que la radiación electromagnética deje de existir. Tanto es así que una línea soterrada en una calle emite una radiación sobre una persona situada justo encima de ella mucho mayor que si esta misma persona se sitúa justo debajo de un cableado aéreo. Lo que sí es cierto es que la radiación disminuye mucho con la distancia cuando la línea ha sido enterrada.
Existen algunos datos significativos que conviene tener en cuenta:
1.- En cuanto a las MEDIDAS DE SEGURIDAD QUE R.E.E. CONTEMPLA EN SUS PROYECTOS en ningún momento se nombra el concepto de radiación electromagnética o electromagnetismo, de modo que no se toma ninguna medida para apantallar o minimizar dicha radiación. Los materiales que aíslan este tipo de radiación son muy caros y no se utilizan y el hormigón no supone una barrera para este tipo de contaminación.
El diseño y la organización de los cables son determinantes para que el campo electromagnético se amplifique o se neutralice. Así, los cables que discurren en paralelo incrementan el campo, mientras que si se trenzan el efecto se neutraliza. Además, si las fases (amperaje) son similares en los cables la radiación no se incrementa, y sí lo hace cuando existe un desfase importante. Estos factores no se tienen en cuenta en las medidas de seguridad de los proyectos de Iberdrola.
2.- LA LEGISLACIÓN ESPAÑOLA permite una radiación magnética de 100 microteslas (Real Decreto 1066/2001 de 28 de septiembre) basándose en una Recomendación Europea de 1999 que fijaba este límite en exposiciones a corto plazo. En España se adoptó esta limitación para exposiciones a largo plazo…
El Informe Bioiniciativa elaborado en 2008 por 14 investigadores de prestigio internacional: científicos, médicos y expertos en salud pública, basado en el estudio de 1.300 referencias bibliográficas concluye lo siguiente: “los límites de exposición a los campos electromagnéticos de baja frecuencia (alta tensión) deben fijarse por debajo de aquellos niveles que se han sido relacionados con un aumento de la leucemia en estudios realizados en niños, más un factor de seguridad adicional. No es aceptable por más tiempo construir nuevas líneas eléctricas e instalaciones eléctricas que colocan a las personas en ambientes de contaminación electromagnética que han sido determinados como niveles de riesgo, niveles de 0,2 microteslas o superiores, siendo el límite aceptable para niños y mujeres embarazadas de 0.1 microteslas”. LA LEGISLACIÓN ESPAÑOLA PERMITE UN LÍMITE DE 100 MICROTESLAS, MIL VECES MÁS! QUE EL NIVEL DE RIESGO. En Suecia el límite establecido en la ley es de 0,25 microteslas, en Italia 0,2 µt y en Suiza 0,1 µt…
En consonancia con lo expuesto en este punto, en febrero de 2011 la International Electro-Magnetic Fields Alliance difundía una declaración de consenso científico, elaborada por un panel de científicos internacionales, en la que urge rebajar los estándares sobre campos electromagnéticos y la contaminación derivada de ellos en pro de la salud pública mundial.
3.- ¿EN QUÉ MEDIDA AFECTAN LAS LÍNEAS SOTERRADAS A LAS EDIFICACIONES MÁS CERCANAS?
Como ya hemos dicho depende del protocolo de anulación de campos electromagnéticos (existencia o no de líneas en paralelo, equilibrio de las fases…) que deben estar contempladas en el proyecto de ejecución. Como Iberdrola no prevé medidas de seguridad para este tipo de contaminación y suele optar por los proyectos más económicos las dudas son más que razonables. Mariano Bueno presidente de la Asociación de Estudios Geobiológicos afirma haber realizado mediciones de 0,2 y 0,3 µt. en un cuarto piso cercano a una línea soterrada…
Enlaces de las webs donde se ha extraído la información:
